El amor de tu vida

Espero que encuentres el amor, y con eso no solo me refiero a tu pareja ideal, sino que encuentres ese sentimiento en todos los aspectos a los que te dediques en tu vida. Y es que una vez que logres apreciar y encontrar amor en tus decisiones, tan pequeñas e insignificantes como tu café de la mañana, ver a esa amistad que ya no frecuentabas o tan grandes y desafiantes como salir y emprender en un nuevo trabajo o aventura.

Que aprendas a vivir de manera consciente el amor, tanto que lo sientas con un abrazo, una canción o en esos momentos de paz en los que tú eres tú propia y única compañía.

Y es que estamos en este mundo para vivir el amor propio y déjame decirte, que amor del bueno; porque no mereces menos que eso, mereces enamorarte de tus errores (aunque te haya costado varios flagelazos de tu parte), de tu humanidad, de tus defectos y de tus virtudes, de la belleza de ser un ser imperfectamente perfecto, simplemente de ser tu.

Espero que te permitas a ti misma encontrar el amor incluso en esos lugares que tanto buscas evitar; sean cosas del pasado, las veces en las que creas que pudiste haber hecho algo mejor, en la plática que nunca quisiste tener, el miedo que todos le tenemos al futuro y la adrenalina de lo desconocido.

Así que recuerda, busca el amor insaciablemente, pero búscalo en ti y para ti, porque si de algo puedo estar segura es que el amor no solo se encuentra en una persona o una relación, el amor es eso que está enfrente de ti todos los días en los detalles que te da la vida. Una vez que lo encuentres dentro de ti y tu propia sanación es que puedes buscar compartirlo con alguien más. De esta manera te relacionaras desde la voluntad y no la necesidad; porque no necesitas a una persona para sentirte plena y feliz contigo misma, pero sí escoges amarla.

Debemos acordarnos que SOMOS amor, y por eso es esencial que nos preguntemos todos los días: ¿Este pensamiento viene desde el amor? ¿De dónde vienen mis acciones? Así encontraremos el amor, lo conquistaremos y practicaremos día a día, con dedicación y ambición.

– Psic. Regina García